Javier Alonso confirmó que las tres jóvenes asesinadas fueron engañadas por una banda transnacional de narcotráfico. Hay cuatro detenidos y se investiga una posible venganza vinculada al crimen organizado.
El ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, confirmó este miércoles en conferencia de prensa que el brutal asesinato de Morena Verdi, Brenda del Castillo y Lara Gutiérrez, las tres jóvenes desaparecidas en La Matanza, fue producto de una venganza narco planificada por una organización criminal transnacional.
Las adolescentes fueron halladas sin vida y descuartizadas, enterradas en el jardín de una vivienda de Florencio Varela, al sur del conurbano bonaerense.
“Lamentablemente confirmamos que los cuerpos hallados pertenecen a Morena, Brenda y Lara, las chicas que estábamos buscando desde el sábado. Fueron engañadas y asesinadas con total premeditación”, declaró Alonso.
Una trampa mortal
Las chicas habían desaparecido el viernes 19 por la noche. Según los datos recabados, subieron voluntariamente a una camioneta en la rotonda de La Tablada, creyendo que asistirían a un evento. Sin embargo, la invitación fue una trampa tendida por una banda narco con base en la Ciudad de Buenos Aires y ramificaciones en el conurbano.
“Creyeron que iban a una fiesta. Pero cayeron en una emboscada organizada por una red narcocriminal que ejecutó una estrategia para asesinarlas”, explicó el ministro.
La reconstrucción del crimen
Gracias al análisis de geolocalización de los teléfonos celulares y horas de revisión de cámaras de seguridad, los investigadores lograron trazar el recorrido del vehículo: de La Matanza a Lomas de Zamora, y luego hasta Florencio Varela.
La camioneta utilizada —una Chevrolet Tracker con patente adulterada— fue encontrada incinerada a 100 metros del lugar del hallazgo de los cuerpos.
Alrededor de las 2 o 3 de la madrugada del miércoles, equipos de la DDI y otras fuerzas localizaron el domicilio donde estaban los cuerpos, enterrados en el patio trasero. Los restos fueron identificados por tatuajes, vestimenta y características físicas.
“Los peritos confirmaron que las jóvenes fueron asesinadas el mismo viernes, entre las 23 y las 0 horas”, detalló Alonso.
Cuatro detenidos y más implicados
Hasta el momento, hay cuatro personas detenidas, incluido el dueño de la vivienda donde se cometió el crimen, a quien las autoridades consideran clave en la causa. Dos de los arrestados fueron sorprendidos limpiando manchas de sangre con lavandina, intentando encubrir la escena del crimen.
“La persona que tiene tres cuerpos enterrados en su jardín no puede desligarse de una responsabilidad gravísima”, subrayó el ministro.
La pista narco y el móvil
Las autoridades sostienen que el triple femicidio fue una represalia directa de una organización narcocriminal con estructura operativa en barrios de emergencia de la Ciudad de Buenos Aires —particularmente en la zona de Flores— y puntos de venta en el sur del conurbano.
“Todo indica que fue una venganza narco. Hay elementos que nos llevan a pensar que las víctimas fueron utilizadas, vieron algo que no debían, o estuvieron involucradas sin saberlo en algo mayor”, sostuvo Alonso.
El móvil preciso aún no fue determinado, pero se investiga si las jóvenes fueron usadas por terceros dentro de la organización criminal, o si fueron ejecutadas por haber sido testigos de alguna actividad clave.
“Esto no fue un homicidio improvisado. Fue un plan meticuloso para engañarlas y asesinarlas. Nada quedó librado al azar”, concluyó el funcionario.
Investigación en curso
La causa está bajo secreto de sumario y cuenta con la participación de la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar). La prioridad ahora es desmantelar toda la estructura responsable, identificar a los autores materiales e intelectuales y avanzar sobre el liderazgo de la red narco que operó el crimen.
