Scott Robertson, entrenador del equipo de rugby neozelandés, dio detalles de la excursión al estadio de Boca Juniors
Un grupo de All Blacks visitaron la Bombonera el sábado pasado para asistir al empate 1-1 entre Boca Juniors y Racing por el Torneo Clausura. Los rugbiers neozelandeses quedaron maravillados con el espectáculo en cancha, pero sobre todo por lo que se originó en las tribunas. Además de difundir imágenes desde las tribunas del estadio, el entrenador del equipo oceánico se refirió a lo que fue una excursión en Argentina que nunca olvidarán.
“El fútbol era por lo que todos estábamos ahí, pero disfrutamos de la compañía de la gente y cantar. No podía creer la lista de reproducción, simplemente siguieron cantando y cantando por tres horas. La energía y el ritmo eran increíbles y estamos tarareando las canciones. No entendíamos las palabras de lo que estaban cantando, pero fue una gran experiencia para nosotros”, declaró Scott Robertson, head coach de los All Blacks, a ESPN.
La llegada de los All Blacks a Buenos Aires marcó el inicio de una agenda que combinó turismo, interacción con la afición local y preparación deportiva. Antes de iniciar los entrenamientos, los jugadores aprovecharon para recorrer la ciudad y sumergirse en la atmósfera del fútbol argentino. La experiencia en la Bombonera, durante el clásico de la cuarta fecha del Torneo Clausura, dejó una huella profunda en el plantel. El fullback Rieko Ioane compartió una panorámica del estadio acompañada de la frase: “Locura de atmósfera”. El pilar Ethan de Groot difundió un video en el que, junto a varios compañeros, entonaba uno de los cánticos emblemáticos de la hinchada xeneize. La cuenta oficial del seleccionado de rugby de Nueva Zelanda sintetizó el momento con un mensaje: “Los de Negro se encuentran con los de azul y oro”, agradeciendo la invitación de la marca que viste tanto a los All Blacks como a Boca.
“La presión en el ambiente es innegable”, escribió Sevu Reece, uno de los jugadores de los All Blacks, al compartir en sus redes sociales una imagen de la multitud en el Alberto J. Armando. La frase, surgida en medio del empate entre Boca y Racing, resume el asombro de la delegación neozelandesa ante la intensidad de la hinchada argentina. La visita de los Hombres de Negro al mítico estadio porteño, en la antesala de su debut en el Rugby Championship frente a Los Pumas, se transformó en un fenómeno viral y en un inesperado cruce de culturas deportivas.
La delegación neozelandesa permanecerá en un hotel céntrico de la capital argentina hasta mañana, día en que viajará a Córdoba para ultimar detalles de cara al debut. El primer entrenamiento formal en territorio argentino fue ayer en las instalaciones del San Isidro Club. Una vez en Córdoba, el entrenador Scott Robertson anunciará la formación titular en conferencia de prensa, mientras que el viernes el plantel realizará el tradicional Captain’s Run en el estadio Mario Kempes.
En paralelo, Los Pumas ya se encuentran instalados en suelo cordobés desde el jueves anterior. El equipo argentino realizó un entrenamiento abierto que reunió a más de 10.000 personas, reflejo de la expectativa que genera el regreso del seleccionado a la ciudad. La emoción fue palpable, especialmente para Joaquín Oviedo, uno de los seis cordobeses convocados, quien expresó: “Es una emoción muy grande estar en este estadio y ver la cantidad de gente que vino a ver la práctica. Tengo muchas ganas de jugar en Córdoba. La última vez fue antes de la pandemia, así que tengo ganas de ponerme la camiseta frente a mi familia y amigos”. El entrenador Felipe Contepomi dará a conocer la alineación titular el jueves, y el viernes el equipo nacional tendrá acceso al estadio para su última práctica antes del enfrentamiento.
Las listas de convocados de ambos equipos presentan novedades significativas. En el caso de los All Blacks, el tercera línea Simon Parker y el pilar Tevita Mafileo podrían debutar con la camiseta negra, mientras que Kyle Preston y Leroy Carter figuran entre los reservas debido a lesiones. El entrenador Robertson subrayó que estos jugadores han sido observados detenidamente y merecen la oportunidad de competir por un lugar en el equipo. Además, celebró el regreso de Tamaiti Williams y Wallace Sititi tras recuperarse de lesiones, así como la reincorporación de Peter Lakai, Finlay Christie y Josh Lord al grupo.
Por el lado argentino, la convocatoria de 34 jugadores anunciada por Contepomi incluye a Nicolás D’amorim y Boris Wegner como jugadores en desarrollo, una apuesta por el recambio generacional y la proyección a futuro. La lista también marca el regreso de seis figuras: Juan Cruz Mallía, Santiago Chocobares, Marcos Kremer, Bautista Delguy, Mateo Carreras e Ignacio Ruiz. No obstante, Los Pumas deberán afrontar el desafío sin tres titulares habituales: Benjamín Grondona, Emiliano Boffelli y Thomas Gallo, quienes quedaron fuera por lesión.
El historial de enfrentamientos en Córdoba añade un matiz especial al partido. Los Pumas no jugaban en la ciudad desde 2014, cuando cayeron ante Escocia por 21-19. Para los All Blacks, esta será la tercera visita a Córdoba: la primera fue en 1976 frente a un combinado del Interior y la segunda en 1985 ante Los Dogos. El regreso de ambos equipos a este escenario refuerza la relevancia del encuentro en el contexto del rugby internacional.
El partido inaugural del Rugby Championship entre Los Pumas y los All Blacks se disputará el sábado a las 18:10 en el estadio Mario Kempes. Tras este encuentro, la serie continuará el 23 de agosto en el estadio José Amalfitani de Buenos Aires, un recinto habitual en los duelos entre argentinos y neozelandeses. La agenda de ambos equipos contempla una preparación intensa y la expectativa de medirse nuevamente en uno de los clásicos más exigentes del calendario del rugby.