La ministra de Seguridad y candidata a senadora por La Libertad Avanza habló sobre los vetos presidenciales, la protesta universitaria y el cambio discursivo de Milei. «La unidad con el PRO es indispensable», subrayó.
«Nos tapamos mucho con los malos modales. Lo que había que resaltar eran las ideas», sostuvo Patricia Bullrich, ministra de Seguridad y figura clave del oficialismo en la Ciudad de Buenos Aires, durante una entrevista en Infobae en Vivo. En un contexto de tensión parlamentaria y movilización social, Bullrich respaldó el rumbo económico del Gobierno pero pidió un cambio en el tono del discurso.
Vetos, protestas y racionalidad fiscal
La entrevista se dio en medio de la discusión por los recientes vetos del presidente Javier Milei, entre ellos los vinculados al financiamiento universitario y la emergencia pediátrica. Bullrich fue contundente:
«Cuando el Congreso vota aumentos sin respaldo presupuestario, genera inestabilidad. Hay que gobernar con responsabilidad, no con proyectos demagógicos».
Frente a las marchas previstas en defensa de hospitales y universidades públicas, la ministra advirtió: “Nuestro rol es cuidar las instituciones. Si la protesta es pacífica, fluye; si hay violencia, vamos a actuar. Si Kicillof va, es evidente que el kirchnerismo busca hegemonizar la protesta”.
Bullrich insistió en que el oficialismo no niega las urgencias sociales, pero cuestiona el uso político de ciertos reclamos:
“La estrategia de seleccionar un tema y forzar la agenda solo busca erosionar el proyecto de país. La solución madura es incorporar estos temas en el presupuesto”.
“El equilibrio fiscal no implica resignar derechos”
La ministra defendió el ajuste con una narrativa que busca diferenciarse del pasado: “El kirchnerismo llenó oficinas de militantes, pero no mejoró la salud ni la educación. Nosotros buscamos eficiencia, no un Estado agigantado”.
Al hablar del tono presidencial, Bullrich reconoció una autocrítica en el oficialismo:
“Hay un cambio claro. El Gobierno tiene que defender el rumbo económico con ideas, no con insultos. La sociedad exige razones, no agravios”.
También destacó la importancia de enfocarse en reformas estructurales: laborales, impositivas, fiscales. “No se puede caer en demandas inmaduras. La discusión debe estar centrada en cómo simplificarle la vida a la gente, no en discursos vacíos”, afirmó.
Unidad con el PRO y rechazo a la “casta extendida”
Bullrich y el candidato a diputado Alejandro Fargosi compartieron espacio y discurso. Ambos reafirmaron la alianza con el PRO y alertaron sobre el peligro de la fragmentación electoral en la Ciudad:
“Esta dispersión solo fortalece al kirchnerismo. La unidad es indispensable”, dijo la ministra.
Fargosi, por su parte, cuestionó el funcionamiento del Congreso:
“Se convirtió en una escribanía opositora. Promueven proyectos que aumentan el gasto sin contemplar la situación fiscal. Así no se puede desarrollar una política de Estado seria”.
También criticó “la maraña normativa” que ahoga al ciudadano y a las empresas: “La casta no está solo en la política. También en el periodismo y otras profesiones. El problema es cuando se aíslan de la gente”.
¿Cambio de rumbo o ajuste del tono?
Ante la consulta por un supuesto giro discursivo luego de la derrota electoral en Buenos Aires, Bullrich negó especulaciones internas: “No es que ahora nos acercamos al PRO. Siempre insistí en una coalición amplia, sin mezquindades. Compartimos valores y objetivos: libertad, orden, economía simple y competitiva”.
Respecto al kirchnerismo, tanto Bullrich como Fargosi lo señalaron como “el fantasma principal de regresión”. Aun con Cristina Kirchner fuera de carrera, creen que su legado sigue influyendo:
“Existe una forma de apropiación del Estado que se mantiene con privilegios y militancia rentada. Ese es el modelo a desmontar”.
“La estabilidad trae paz”
Bullrich reconoció el malestar económico de la sociedad, pero pidió sostener el rumbo:
“La gente me dice: ‘los banco, aunque no llego a fin de mes’. La estabilidad es el primer paso. Hay que evitar atajos demagógicos y sostener el esfuerzo”.
Con la mira puesta en las legislativas de octubre, Bullrich ratificó la centralidad del programa económico y la importancia de consolidar una mayoría parlamentaria oficialista. “El desafío no es solo ganar elecciones, es construir gobernabilidad. Y eso se logra con firmeza, ideas y sin insultos”.