La ministra de Seguridad y candidata a senadora por La Libertad Avanza pidió que José Luis Espert dé explicaciones públicas sobre la denuncia que lo relaciona con el empresario acusado de narcotráfico. Espert respondió y negó irregularidades, aunque no desmintió el supuesto depósito de 200.000 dólares.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, volvió a presionar al candidato a diputado nacional por La Libertad Avanza, José Luis Espert, para que “vuelva a los medios y conteste claro” sobre las acusaciones que lo vinculan con Fred Machado, empresario señalado en causas vinculadas al narcotráfico y señalado como supuesto financista de campañas.
En una entrevista con A24, Bullrich sostuvo que su espacio mantiene “una vara altísima” en materia ética y que, por ese motivo, exigía respuestas públicas: “Nosotros tenemos una vara muy alta, altísima… el voto liberal, el voto republicano, exige respuestas”. Además criticó lo que definió como el “manoseo” de las instituciones por parte de otros sectores de la oposición y afirmó que hay que “cortar” prácticas que dejan a legisladores “a merced de una mayoría de circunstancias”.
Espert, por su parte, salió a responder a las acusaciones que lo relacionan con Machado. En su defensa afirmó que la causa que lo menciona es de 2021 y se refiere a hechos de la campaña presidencial de 2019. Dijo que la documentación presentada —“recortes de diarios”, en su descripción— formó parte de una “campaña de difamación” y que lleva cuatro años siendo objeto de acusaciones que, según él, buscan perjudicarlo políticamente.
Sobre la acusación puntual de un supuesto depósito de 200.000 dólares, Espert evitó una desmentida categórica. Relató que conoció a Machado en 2018 durante la presentación de su libro y que, en 2019, usó aviones y vehículos que le facilitó el sello partidario UNITE, dirigido por terceros: “Los candidatos en campaña nos subimos a dónde el sello partidario nos dice. Nosotros no manejamos fondos partidarios”, explicó, y comparó la situación con tomar un taxi sin conocer su historial.
El economista además se mostró conciliador respecto a la disputa judicial con Juan Grabois, a quien señaló como impulsor de la denuncia mediática: “No le voy a dar el gusto a Grabois que sea el único tema de campaña… Ellos no quieren que se discutan las cosas importantes en campaña”, afirmó. También atacó a Grabois desde lo personal: “Grabois vive de sacarle guita a los pobres, yo vivo de mi laburo. A Grabois le voy a contestar en la justicia y lo voy a seguir hasta abajo de la cama”.
La controversia desemboca en un debate mayor sobre los límites del escrutinio público y el financiamiento político: mientras Bullrich reclama claridad pública por la “vara” ética que propone su espacio, Espert sostiene que las acusaciones forman parte de una campaña en su contra y responsabiliza a adversarios políticos por la difusión del caso.
La disputa se da en plena campaña electoral, con candidaturas y mensajes que buscan captar voto liberal y republicano, y con un contexto en el que cualquier denuncia mediática puede convertirse en eje de la agenda pública. Bullrich insistió en que Espert debe dar explicaciones públicamente; el candidato, por ahora, respondió desde su entorno mediático y judicial, sin un desmentido absoluto sobre el monto denunciado.